viernes, 15 de julio de 2016

14 STANLEY PARK

¡¡Hoy se nos ha caído un mito!! ¡¡Es mentira que todos los chinos sean iguales!! Me explico. Esta tarde cuando terminaron las clases y vimos el cartel de las actividades resulta que nos habían separado por clases: un grupo iba a ir al acuario y el grupo B se dirigiría a disfrutar de un paseo en bici por Stanley Park. Después de explicar a la coordinadora que, como gallegos que somos, no nos gusta separarnos y que siempre quiero estar con mis chicos, acepté que esta vez y el próximo día que coincidiesen las actividades fuese así, pero no más. A mi e tocó con Dani, Quique, Ana R. y Lucía ir a pedalear.

Tomamos el bus y llegamos a la entrada del parque donde en una de las múltiples tiendas de alquiler de bicis nos proporcionaron los vehículos. Éramos unas treinta personas entre nosotros, los habituales de la otra semana, los chinos y los árabes. Cuando estábamos preparados emprendimos una ruta preciosa bordeando la península que forma Stanley Park, el mismo que visitáramos el primer día en bus por el interior. Parecíamos la “serpiente multicolor” de la Vuelta de forma que éramos tantos que chocábamos cuando uno frenaba inesperadamente, alguno de hecho se fue al suelo (como Enrico, no Enrique, sino Enrico). Hicimos alguna parada para descansar y reagruparnos y en una de estas la monitora china se dio cuenta que había perdido a tres de sus “unidades” en el circuito y otro estaba en el césped atendido por los primeros auxilios de una de las profesoras y su botiquín. Total, que Lucía y yo nos fuimos a la caza de esos tres alumnos desaparecidos con una foto en el móvil mientras los demás esperaban allí. Pues nada que no los encontramos y regresamos, pero habían ido todos porque dos de ellos ya habían vuelto a la tienda de bicis cuando nos perdieran de vista. Al localizar a la monitora china nos informa de esto pero que aún le falta una pequeña de 14 años; pues nada, foto de la niña y a la caza y captura. La encontramos casi al principio de la actividad en una parada que hiciéramos para ver unos tótems: allí estaba, quieta y agarrada a su bici mirando a ambos lados, pero lo más curioso es que la reconocimos en medio de tanto oriental pedaleando a esas horas. ¡¡Ahí fue cuando nos percatamos de que no son todos iguales!! Bueno, una especie de corbatita blanca que llevaba ayudó mucho.  Regresamos al punto de inicio y volvimos al cole con unos 40 minutos de retraso por el rastreo.

Así se nos pasó la tarde; los que fueron al acuario también estaban muy contentos con la visita. Nosotros la disfrutaremos la semana que viene, el que más va a ser Quique por hoy, palabras textuales, “este sillín me ha producido un desgarro de ano. Álvaro, me duele mucho el culo” Y caminaba como John Wayne en “El Dorado” o “Río Bravo”

Por cierto, a mediodía continuamos nuestro torneo de billar. Ahora hay que luchar por la mesa porque hay dos árabes que nos la acaparan, pero ya hemos llegado a un acuerdo. En definitiva, la contienda Antía-Lucía frente a Ana R. – Quique, se saldó con una victoria aplastante de las primeras que no dieron a la segunda pareja la más mínima opción.

Fátima quiere enviarle un recuerdo y un beso muy grande a su madre Cristina y se ha presentado voluntaria para que le hiciésemos esta foto en recuerdo de su última salida de fiesta. Creo que algo tiene que ver con “vivan las cajeras del Gadis”. ¡¡Aquí hay para todos!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario